top of page

Una historia de amor en Bastidas: vecinos se unen para alimentar a animales callejeros.

  • Foto del escritor: en97 lactam
    en97 lactam
  • 25 sept
  • 1 Min. de lectura

ree


En el barrio Bastidas, la empatía se transformó en acción. Ante la creciente presencia de perros y gatos sin hogar en el parque principal, un grupo de vecinos y líderes comunitarios decidió unirse para darles una mano —o mejor dicho, un plato lleno.


Con creatividad, compromiso y tubos de PVC, idearon dispensadores de comida que fueron instalados en varios puntos del sector, especialmente en zonas donde suelen reunirse los animales. Así nació una iniciativa solidaria que busca garantizar que ningún peludo pase hambre.


El proyecto, completamente voluntario, invita a todos los residentes a sumarse donando concentrado o colaborando con el mantenimiento y limpieza de los dispensadores. Más que una acción puntual, se ha convertido en un símbolo de unidad y cuidado colectivo.


En Bastidas, el amor no solo se demuestra entre vecinos, sino también con aquellos seres que, sin voz, forman parte del mismo entorno. Una comunidad que cuida, alimenta y se solidariza con quienes más lo necesitan, sin importar cuántas patas tengan.



ree

Comentarios


bottom of page