Unimagdalena hace un llamado al Congreso para aprobar la reforma a la Ley 30.
- en97 lactam
- 19 sept
- 2 Min. de lectura

La Universidad del Magdalena se une al llamado nacional para respaldar el Proyecto de Ley 212 de 2024, que propone la actualización de los artículos 86 y 87 de la Ley 30 de 1992, con el fin de establecer una nueva fórmula de asignación de recursos para las universidades públicas. Esta reforma busca garantizar una financiación justa, progresiva y sostenible, basada en criterios de calidad, inclusión, cobertura y desarrollo regional.
El rector Pablo Vera Salazar recordó que, en 1992, la Universidad contaba con apenas 2.000 estudiantes, mientras que hoy la cifra se aproxima a los 30.000. Sin embargo, la transferencia de recursos por estudiante ha disminuido con el tiempo, a pesar del respaldo del actual Gobierno y de las luchas históricas de la comunidad universitaria.
“Durante más de tres décadas, los recursos para la educación superior pública han crecido solo con el IPC, mientras las universidades aumentaban su cobertura, matrícula, investigación e infraestructura. Esto ha generado un desfinanciamiento crónico que afecta la calidad y limita el acceso a miles de jóvenes en las regiones”, explicó el rector.
Frente a este panorama, el rector hizo un llamado enfático al Congreso:
“Senadores y senadoras: el Proyecto de Ley 212 de 2024 representa una oportunidad histórica para cerrar la brecha de financiamiento de la universidad pública. Para Unimagdalena, significa asegurar inclusión, innovación y compromiso con el Caribe colombiano”.
La aprobación de esta reforma permitirá a las universidades públicas contar con más recursos para ampliar la cobertura, mejorar la infraestructura, fortalecer la investigación y garantizar el bienestar estudiantil. En el caso de Unimagdalena, esto se traduce en el fortalecimiento de programas de inclusión como Talento Magdalena y Talento Santa Marta, así como en una mayor equidad frente a universidades del centro del país.
El rector concluyó destacando que esta reforma no es solo un acto de justicia del Estado, sino un paso fundamental para que la comunidad universitaria continúe soñando, transformando vidas y construyendo territorio a través de la educación pública.








Comentarios