Xi y Carney, reunidos en Corea del Sur, intentan reconstruir las relaciones entre China y Canadá.

Los líderes de China y Canadá dieron el viernes un paso hacia la reparación de las relaciones, fracturadas desde hace mucho tiempo, entre sus países.

El presidente chino Xi Jinping y el primer ministro canadiense Mark Carney, reunidos en Corea del Sur durante una cumbre de Asia-Pacífico , hicieron un llamamiento para mejorar las relaciones de manera pragmática y constructiva, según ambas partes.

“Los líderes coincidieron en que su reunión marcó un punto de inflexión en la relación bilateral”, señaló un comunicado canadiense.

Según declaraciones de Xi, las relaciones muestran signos de recuperación gracias a los esfuerzos conjuntos de ambas partes.

“Estamos dispuestos a trabajar junto con Canadá para aprovechar esta reunión como una oportunidad para promover el retorno de las relaciones bilaterales a una senda sana, estable y sostenible lo antes posible”, dijo Xi, según un informe oficial distribuido por los medios estatales chinos.

Carney, quien asumió como primer ministro en marzo, aceptó una invitación de Xi para visitar China, según el comunicado canadiense, sin especificar ninguna fecha.

Más tarde, Carney también declaró a los periodistas que estaba “muy satisfecho” con el resultado.

“Nos encontramos ahora ante un punto de inflexión en la relación, un punto de inflexión que crea oportunidades para las familias canadienses, para las empresas canadienses y para los trabajadores canadienses, y que también abre un camino para abordar los problemas actuales”, afirmó.

Las relaciones se deterioraron drásticamente a finales de 2018 después de que las autoridades canadienses arrestaran a una alta ejecutiva del gigante tecnológico chino Huawei en el marco del acuerdo de extradición con Estados Unidos. Posteriormente, China arrestó a dos ciudadanos canadienses y los acusó de espionaje.

Las relaciones no mejoraron mucho incluso después de la liberación en 2021 de los dos canadienses, Michael Kovrig y Michael Spavor, y de la ejecutiva china, Meng Wenzhou, hija del fundador de Huawei.

Más recientemente, las relaciones se han visto afectadas por la decisión de Canadá de imponer un arancel del 100% a los vehículos eléctricos procedentes de China en 2024 y un arancel del 25% al ​​acero y al aluminio. China ha ofrecido eliminar sus aranceles a la importación de algunos productos canadienses si Canadá retira el arancel a los vehículos eléctricos.

Canadá fue el último en tomar esta medida, junto con Estados Unidos.

El comunicado canadiense indicó que ambos líderes ordenaron a sus funcionarios actuar con rapidez para resolver los problemas y roces comerciales y discutieron soluciones para productos específicos como vehículos eléctricos, canola y mariscos.

Xi abogó por ampliar la cooperación “pragmática” en áreas como la economía, el comercio y la energía. Tanto Canadá como China se han visto afectadas por los aranceles impuestos por el presidente estadounidense Donald Trump.

Los productores canadienses de canola, los exportadores de mariscos y los criadores de cerdos se enfrentan a elevados aranceles chinos en represalia por el arancel del 100% que Canadá impuso el año pasado a los vehículos eléctricos, las baterías y otros productos chinos.

El embajador de China en Ottawa declaró recientemente que Pekín retiraría sus aranceles si Ottawa cancela los aranceles a los vehículos eléctricos.

Este intento de acercamiento se produce en un momento en que Carney busca diversificar el comercio de Canadá para reducir su dependencia de Estados Unidos y mientras Trump anuncia su intención de aumentar los aranceles a las importaciones de productos canadienses en un 10% adicional. El tratado de libre comercio entre Canadá y Estados Unidos está siendo revisado.